martes, 17 de agosto de 2010

La crisis...

Victoria sindical en el Mercadona de Salt (Girona)

El viernes 14 de agosto, se ha llegado a un preacuerdo, a la espera de su ratificación ante las instancias judiciales, donde Mercadona cede en TODAS las reivindicaciones presentadas por CNT Olot en el conflicto iniciado en el centro comercial que la empresa tiene en la población de Salt.

Mercadona reconoce en este documento los errores cometidos y pone sobre la mesa de negociación dos posibilidades de acuerdo: Indemnización económica o readmisión de nuestra compañera a su puesto de trabajo con las mismas condiciones económicas que antes. Vista la nueva actitud de Mercadona, que a diferencia de la anterior es muy positiva, CNT Olot deja las acciones previstas por este conflicto en suspenso hasta la firma definitiva del acuerdo entre los representantes de Mercadona y nuestra compañera de sindicato. Una vez ratificado el acuerdo, se retirará la demanda judicial que hay contra Mercadona por este conflicto concreto. Una vez más se demuestra la validez de nuestro modelo sindical, sin subvenciones, sin liberados sindicales, ni elecciones a comité de empresa. La acción directa y la asamblea demuestra una vez más su fuerza de lucha.

Roma estudia imponer un impuesto a los manifestantes

El alcalde de Roma, el conservador Gianni Alemanno, ha anunciado que el consistorio capitalino está estudiando la introducción de un impuesto a la celebración de manifestaciones en sus calles para saldar el gasto adicional que éstas suponen en concepto de servicios de limpieza y de seguridad.

"Deben pagar algo, no podemos pagar sólo nosotros", manifestó el alcalde de Roma en referencia a los manifestantes. Alemanno, miembro del gobernante Pueblo de la Libertad (PDL) liderado por el primer ministro Silvio Berlusconi, subrayó, asimismo, que aquellos que critican la medida no conocen los costes que la ciudad debe afrontar con cada manifestación.

Alemanno explicó que una protesta que logre reunir a 10.000 personas tiene un coste de cerca de 7.000 euros para el ayuntamiento en concepto de horas extraordinarias de la policía municipal y de 10.000 euros por los servicios de limpieza y sanitarios.

Críticas por ambos lados

El anuncio del alcalde de Roma levantó las críticas tanto de la oposición como del centro derecha.

Así Renata Polverini, presidenta de la región del Lacio, cuya capital es Roma y que se presentó a los últimos comicios regionales en alianza con el PDL, comentó que, pese a comprender el problema planteado por Alemanno, no cree que sea posible "penalizar ulteriormente a aquellos que salen a las calles para reivindicar un derecho o defender el propio puesto de trabajo".

Desde las filas del partido opositor de Italia de los Valores (IDV), Antonio Borghesi, portavoz de la formación en la Cámara de los Diputados, mostró su oposición a la medida al comentar: "IDV está estudiando introducir una tasa sobre las palabras lanzadas al viento por ciertos políticos".

En esta misma línea se posicionó el principal partido opositor, el Partido Demócrata (PD), desde el que se afirmó que "no existen límites a la fantasía del alcalde (de Roma) a la hora de inventar nuevas tasas".

"Querría recordar a Alemanno que la libertad de manifestarse está garantizada por la Constitución y por las reglamentaciones sucesivas", subrayó el líder del PD en el ayuntamiento romano, Umberto Marroni.